Tengo un tilo precioso. Aunque, siendo yo el que está debajo y dado que el árbol me debiera sobrevivir, sería más adecuado decir que es él quien me tiene a mí, cosa, por lo demás y por estas mismas y otras razones, aplicable a cualquier posesión, pero ya nos entendemos. Creo que su género me llamaría por primera vez la atención al saber de un paseo con un nombre tan cantarín como el Unter den Linden de Berlín. Y tengo un vivo recuerdo de los de la parte alta de la Rambla de Cataluña en una limpia y luminosa mañana de San Jordi en Barcelona, verde y negro con resquicios azules, y bajo ellos, el multicolor de los libros y las rosas y de la gente con ropa de primavera.
Mi árbol también me recuerda cuando, en el siglo pasado, un amigo algo insensato tuvo la peregrina idea de pedirme que le presentase un libro suyo con tilos en el título, cosa que hice, tratando de salvar su dignidad y mi vergüenza (o viceversa), yéndome por los cerros de Úbeda con la literatura y la persistencia de la memoria. Además de tristemente circunspecto, creo que estuve a la altura del libro.
Pero hasta que no tuve mi tilo, no sabía nada del intensísimo y penetrante olor dulzón de sus flores, ni había caído en la cuenta de que es con esas flores, secas, con lo que se prepara la tila. A mis abejas (aún menos mías que mi tilo) les interesa mucho su polen, y puede que sea por sus propiedades tranquilizantes por lo que no me pican nunca, por mucho que insista en molestarlas al chocar con sus ramas más bajas cuando paso distraído bajo él, pensando en mis cosas. O sea, casi siempre que no le hago caso.



A esas abejas lo que las tranquiliza es el tilo de Franz:
aquí acompañado por Im frühling. Precioso tilo.
Precioso y apropiadisimo lied, mañana se/me lo pongo debajo del tilo. Im frühling, dados los colores que tiene ahora, también le va a gustar mucho 😉
Quina enveja!
Per aquests verals tenim associats els til·lers al arbres bonics, aromàtics, simpàtics, de mesura humana com els de la Rambla de Catalunya de Barcelona o els de l’Avinguda M.D. Montserrat del Prat de Llobregat.
És quan viatges nord enllà cap a l’Europa humida que descobreixes que hi ha una arquitectura romànica grandiosa, desmesurada i uns til·lers que competeixen amb els temples en alçària i grandiositat. Llavors comprens que Schubert cantés a UN til·ler
Viatge Hamburg ’06 Garbellades0071
Segueixo sense recordar com enganxar una imatge. Sniff
La foto és de Hildesheim
Ja saps on és.
Enviam l’enllaç, però al nord dels Pirineos es passen amb els arbres. I em penso que Schubert cantava a un til.ler més casolà. 😀
Marchando.
Com el meu es posi així, se’m menja la casa…
Costa parlar de floretes
Evocacions de til·ler
– Un de forma quasi perfecta i magnífic al Prat, quan era una adolescent, que va ser tallat. Vaig plorar.
– Un Ritmo blanc aparcat una tarda d’estiu sota d’un til·ler florit a Conques (un lloc preciós i un romànic esplèndid) que l’endemà era un camp d’abelles brunzint sobre les flors caigudes i que quan vam arribar al nou destí encara les hi duiem al sostre del cotxe.
– Un aparcament de cotxes a l’hotelet de Celle (Alemanya) sota molts til·lers florits i amb un perfum que quasi col·locava i un terra cobert de flors.
– L’emoció estètica dels volums arquitectònics combinats amb les formes harmòniques de til·lers majestuosos.
– Una interpretació meravellosa de Jonas Kaufmann (amb Deutsch al piano) al Liceu cantant el Winterreise.
Gràcies per provocar evocacions
Veig que el flaire del meu til.ler té propietats proustianes. I m’ha agradat molt la paraula brunzir, encara que he de dir que «zum» és més onomatopeic que brunz 😀
Yo que soy más prosaica recuerdo los preciosos » tilos de la Rambla de Catalunya»y que además
siempre les recuerdo ,que cuando paseen por allí recuerden que «aquellos árboles son tilos»
U.A.Y adióooooooós 😀 😀 😀 y así hasta el infinito
Se borró mi comentario.
¿ No tengo ningún problema pero es original. ? bueno simplifiquemos y con la U.A.,va que
chuta.
Original siempre, desde luego, entre el infinito y un U.A. que va que chuta. 😀
No me he sabido explicar.¿porque yo voy por la vida con mis dos apellidos ? No me quejo pero
debo de ser una especimen rara muy rara rarísima U.A.y adióoooooos 😀 😀 😀
Ya sabes que raro es un elogio.
Precioso y voluminoso el tilo, preciosas y precisas las referencias musicales y viajeras, precioso el idioma catalán leído y disfrutado desde mi corto conocimiento que de él tengo. Soy extremeño, aunque me entusiasma leer a Espriu y escuchar a la Nuria Feliú. Gracias por esta es-«tilo»-sa página.
Gracias a tí, los de las referencias viajeras van también a estar muy contetntos con lo que dices. Pero el «la» que precede a Nuria Feliú revela tu profundo conocimiento de la lengua, de modo que no despistes 😀 Esta primavera, con el campo abarrotado de amapolas, me he acordado mucho de Espriu: «La ginesta floreix, arreu als camps hi ha vermell de roselles….»