En música, un recitativo es la “forma de exponer oralmente un texto a medio camino entre la mera recitación y el canto propiamente dicho”, “una forma musical concebida para la voz humana que se caracteriza por tener las inflexiones de esta voz cuando dialoga”. Y los recitativos abundan en las óperas, los oratorios y las cantatas, porque son un eficaz recurso para hacer avanzar la acción entre las arias y coros, dramáticamente muy lentos cuando no estáticos. Lo que no significa que no los haya muy buenos, especialmente si dan con quien sepa sacarles el jugo.
Pero también existen recitativos exclusivamente instrumentales, y así lo han indicado distintos autores para pasajes que se parecen a recitativos vocales, con una línea llevando la melodía del cantante (a menudo pero no necesariamente para un solista) y otra el acompañamiento. Uno de los primeros y más claros ejemplos es el segundo movimiento del Concierto para violín, “Gran Mogol”, RV 208 de Vivaldi.
También prescribió Bethoven “Selon le caractere d’un recitative, mais in tempo” para los contrabajos que al inicio del cuarto movimiento de su Novena Sinfonía siguen el camino que les llevará a la Oda a la alegría, ignorando las apariciones de los tres movimientos anteriores.
Y como un virtuoso recitativo de violín con acompañamiento de arpa compuso Rimsky-Korsakov el tema de Sheherezade .
De modo que ya sabemos una cosa más: existe el recitativo instrumental. Otra cosa es para que sirve. Saberlo.
® Hace diez años: EBNDCD – También los recitativos (Cantata “Christen, ätzet diesen Tag” BWV 63)
Pues sí, tambièn, también existe, como Teruel. 🙂
PD: muy buenos los ejemplos que aportas.
Los que puso la señorita internet en clase 😀