«En cualquier arte es necesario tener inspiraciones filosóficas que nos aporten un punto de trascendencia y espiritualidad. Pero pensar mucho puede acabar distrayéndonos de nuestro propósito. Hay muchas preguntas, cuyas respuestas no pueden expresarse con palabras. Éstas se sienten, se intuyen, pero jamás se podrán redactar en una frase. De la música de Bach, por ejemplo, emana un misticismo que no llegamos a comprender. Confiamos en que hay un secreto vital en ella que se nos escapa. Y su búsqueda es algo imposible. Siempre hay que dejar algo para las fauces del misterio. »
Lo cual es especialmente cierto…
…cuando llega uno de esos movimientos lentos…
…pero también ante la gloria de un Presto como el del Concierto Italiano de Bach,
que Rafal Blechacz interpreta manteniéndose fiel a sus principios:
«Afrontar una partitura es un lienzo repleto de libertades, pero hay una premisa de la que no nos debemos olvidar nunca: somos intérpretes, no compositores. Nuestra única responsabilidad es la de sumergirnos en la lógica que el compositor propone.»
Rafal Blechacz, Scherzo, 2022
® Hace diez años: Rafal Blechacz en L’Auditori
El fascinante «Concierto italiano» desprende una alegría contagiosa. Es un Bach desatado, feliz, entusiasta. Bien seguro lo compuso en un hermoso día. Y magnífico Rafal Blechacz, con lo que hace y con lo que dice.
«Práctica de teclado que consiste en un concierto según el gusto italiano y una obertura según el modo francés para un clavicémbalo con dos manuales, compuesta para los amantes de la música, para refrescar sus espíritus, por Johann Sebastian Bach, Kapellmeister a Su Alteza el Príncipe de Anhalt-Cöthen y Director Chori Musici Lipsiensis»