En 1984 , mientras vivía en New York, Dvorak compuso un ciclo de diez canciones sobre textos bíblicos que él mismo seleccionó de «El libro de los salmos». La séptima, Por los ríos de Babilonia, lamenta el exilio en Babilonia a que los judíos se vieron forzados después de que Nabucodonosor destruyese Jerusalén y Dvorak comparte con ellos la añoranza por su patria. Aunque no hay nada fluvial en esta canción, ni siquiera en el texto del salmo, que simplemente ubica el lugar de su cautiverio, vale mucho la pena aprovechar la ocasión para escuchar esta joya oculta del compositor checo,
bastante menos conocida que la homónima, Rivers of Babylon con que los alemanes Boney M. lograron su mayor éxito a finales de los setenta, un «espiritual rastafari» sin conexión alguna con el judaísmo pero basado en ese mismo salmo.
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