El canto tiene muchas ventajas, incluso para quien no canta profesionalmente:
1. Proporciona una respiración amplia y profunda. Pero es preciso practicarlo. No basta con sentarse a escuchar discos de grandes cantantes.
2. Favorece el desarrollo de los músculos del tórax. Usted será admirado o admirada en playas y gimnasios.
3. Endereza el busto, con lo cual evita incómodas cirugías plásticas de levantamiento.
4. Aroma a veces el aliento.
5. Mejora el control de la respiración, lo que equilibra los centros nerviosos y produce profunda tranquilidad. Para comprobarlo, ensaye el siguiente y sencillísimo ejercicio:
Ejercicios de respiración
Primero: llene sus pulmones de aire y conténgalo durante quince segundos; percibirá una sensación de potencia y vigor: esto se llama inspiración.
Segundo: exhale lentamente el aire contenido; sentirá una sensación de relajamiento y alivio: esto se llama espiración.
Tercero: infle de nuevo los pulmones y contenga el aire durante diecisiete minutos; sentirá primero que se asfixia, después se sentirá mareado y por último sentirá que viene a buscarlo un viejo bondadoso de barba blanca: esto se llama expiración.
Cantando bajo la ducha. Jorge Maronna (Les Luthiers) y Daniel Samper.