Una historia no de Hollywood. Inez Haynes Irwin, esposa de Will Irwin, solicitó un pasaporte el otro día y, con la ayuda de Will Irwin y Wallace Irwin, comenzó a rellenar el impreso por el apartado “descripción”. Una de las preguntas decía “¿Boca?”. Bueno, eso era fácil. “De color rojo brillante, en forma de arco de Cupido, con deliciosas comisuras sombreadas”, escribió. Pero la siguiente pregunta la hizo dudar: “¿Rostro?” ¿Qué escribo aquí?, preguntó. Escribe «Sí», le dijo Wallace Irwin.
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De una carta de P.G. Wodehouse publicada en la antología ¡Pues vaya! de Editorial Anagrama. Recuerda un chiste en el que un argentino no se conforma con un «Sí» cuando le preguntan por su sexo.
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