Fences, más que cine es teatro filmado, y como tal, una absoluta delicia para los que seguimos disfrutando con Un tranvía llamado deseo o con La muerte de un viajante, dos obras con las que coincide en su magnífica construcción dramática (y en alguna cosa más con la segunda). Fences (cercas o vallas), es uno de los dos premios Pullitzer de August Wilson, y la pareja protagonista de la película, Denzel Washington y Viola Davis, fue también premiada en los Tony en una reciente reposición teatral de la obra. Y realmente antológico es el personaje que crea Denzel Washington, muy alejado de su donperfecto habitual, aunque la escena cumbre de la película pertenece a Viola Davis, y es la humanidad del amigo Bono (Stephen Henderson) y el arquetípico personaje de un hermano retrasado (Russell Hornsby) lo que redondea la estupenda teatralidad de la obra.
El punto conflictivo es para los no anglocomprendedores, porque Fences puede arrebatar a la Luna Nueva de Howard Hawks el record de película con más diálogos de la historia: Denzel Washington habla a toda velocidad y no calla, de modo que seguir los subtítulos es un problema y quedarse (también) con la mitad de las interpretaciones optando por el doblaje, otro: Si fuera bueno, y sin sentar precedentes, quizás mejor doblada.
Y ya que estamos en semana de Oscars: Pase lo que pase y se haya escrito lo que incomprensiblemente (o no) se ha escrito, que nadie pique con La la land, que con un intoxicado y muerto de aburrimiento es suficiente. Tampoco recomendaría yo mucho Toni Erdman, más desagradable que gracioso, y para muy poca cosa. Mi voto para Comancheria, Manchester frente al mar y Moonlight, magníficas las tres. Y de las extranjeras, la iraní El viajante, tremenda.
Ancha es mi casa 
Un altre bon amic em va uatsapar dijous passat això:
» Si ja heu anat a veure La la land, la cosa no té remei. En cas contrari, aconsellem ferventment d’evitar-la»
«… pel que fa a la pel·licula, ens ha semblat una llauna molt cursi, de cap a cap, amb dos actors insuportables, una història menys que minsa i una música gairebé inexistent; la coreografia i els decorats són d’alló més antic i sense la gràcia dels Kelly, Rogers o Caron. Això si, no deixen de recordar-te a cada moment que es tracta d’un «homenatge» a aquells grans musicals»
Ni musica ni cine, un frau, i amb molts critics implicats.
The winner is… La la Land; oh no! Moonlight.
Enhorabona JLR!
Això passa als Gaudí i diriem que és cutre i tercermundista. Autoodi.
Aquest vici del autoodi em penso que ens agermana amb altres… ibers. 😀
La veritat és que m’ha alegrat especialment el triomf de la Iraní. Toni Erdman no és dolenta, el personatge em va resultar molt desagradable, l’humor molt justet, el conjunt una mica cutre i m’emprenya la moralina des de la superioritat burgesa centro europea. El viajante té algun defecte de construcció narrativa, però es en conjunt molt bona i amb un final magnífic.
Moonlight és una molt bona peli. Avui em feia patir escoltar com elogiaven La la land periodistes de totes les especialitats, demostrant el seu gust. Sembla que el nivell cultural d’aquests creadors d’opinió és més aviat baixet.
He tomado nota y me apunto a «Fences» y no pienso aguantar el dichoso La La Land.No la he
visto pero por lo leido y escuchado !!!!nooooo!!!!! .UA.y adiooooooo´s …..C
…..) :……)…….)
Esta visto que no doy una ,con los emoticones.
Pues peor para ellos, nos entendemos igual, no? ::::)))))